- Este jueves se llevó a cabo el foro "Libertad religiosa, acciones y límites en el ejercicio público y ciudadano"
Zurya Escamilla Díaz | Tlaxcala | 27 de noviembre de 2024
Fomentar la tolerancia en la sociedad requiere avanzar hacia la discusión de temas complejos como la política y la religión, así de promover la libertad religiosa como un derecho humano que las personas pueden ejercer en lo individual y en colectivo, expresó Doraisa Ramírez López, presidenta del Consejo Interreligioso del Estado de Tlaxcala.
Previo a la presentación del foro "Libertad religiosa, acciones y límites en el ejercicio público y ciudadano", aseveró que la fe es un tema muy importante que -como la política y el deporte- muchas veces se deja fuera de la mesa para evitar conflicto; pero que al final se traduce en la falta de entendimiento que genera estragos en la sociedad.
Agregó que si bien existen diferentes agrupaciones religiosas con distintas creencias y formas de ver el mundo, al final se encuentran interconectadas y ésta debe ser la base para construir acuerdos que fortalezcan a la sociedad.
Por su parte, Víctor Manuel Ávila García, titular la Oficina para la Atención de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, afirmó que es necesario que los diferentes niveles de gobierno tengan una participación permanente y estrecha en la construcción del respeto a la libertad religiosa, la protección de derechos humanos y a la expresión religiosa.
En consecuencia, aseguró que el gobierno estatal tiene el compromiso de impulsar este tipo de foros que contribuyen a fortalecer a la sociedad al promover el diálogo entre diferentes expresiones religiosas y que esto contribuya a la unidad en los diferentes sectores sociales.
A través de un video proyectado en el Teatro del IMSS en Tlaxcala, Cristian Badillo Gutiérrez, empresario y especialista en materia de libertad religiosa, recordó que la Libertad Religiosa está protegida por leyes nacionales y tratados internacionales que tienen como propósito garantizar el derecho de las personas a vivir conforme a sus ideas y prácticas religiosas, tanto en lo personal como en lo colectivo; así como a ejercerlas en el ámbito público y privado sin menoscabo a su libertad de expresión.
En este sentido, abundó que todo pensamiento, conciencia y religión está protegida a través de la norma; lo que obliga a los diferentes sectores de la sociedad a promover la tolerancia a los diferentes tipos de credos mediante el diálogo.
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