Covarrubias y Zainos se despiden del Congreso entre denostaciones previas a campaña

 

Zurya Escamilla Díaz (Tlaxcala, 26 de marzo de 2024) En su última sesión antes de separarse del cargo, los diputados Miguel Ángel Covarrubias Cervantes y Bladimir Zainos Flores utilizaron la tribuna del Congreso del Estado para evidenciar la rivalidad que en próximas semanas llevarán al terreno de las campañas electorales, puesto que ambos contenderán por la reelección en el distrito 12 con cabecera en Teolocholco.

    Mientras en la sesión ordinaria de este martes se discutía la solicitud de licencia de la diputada Blanca Águila Lima, Covarrubias Cervantes aprovechó para tratar de demeritar el trabajo que Zainos Flores hizo como alcalde de Tepeyanco al afirmar que fue él quien gestionó recursos para la realización de obras en ese municipio como adoquinamiento, imagen urbana, techumbres, entre otros. Por lo que señaló que no se debe abusar de la confianza de la ciudadanía y luego regresar con pretextos a pedir el voto nuevamente.

   Pese a que el presidente de la mesa directiva, José Gilberto Temoltzin Martínez, le llamó a centrarse en el tema puesto a discusión, Covarrubias insistió en que continuaría con su última intervención y lo hizo así en medio de los gritos el numeroso público presente en la sesión dado el cambio de legisladores que se combinaron con ademanes de otros legisladores que pedían se apagara el micrófono.

    "El diputado Bladimir Zainos ha dicho que es lo equivalente a una pequeña y linda luciérnaga, quiero hacer dos precisiones técnicas. La primera, una luciérnaga vive 61 días nada más y el brillo de una luciérnaga solamente se da al momento de quererse aparear, espero que éste no sea el caso. Es cuanto, señor presidente. Nos vemos en el distrito", concluyó.

    Con autorización de réplica, Bladimir Zainos afirmó que la gente descontenta con su administración en Tepeyanco es porque sus intereses fueron afectados. En el mismo sentido, señaló que el manejo del "fondo moches", al que aludió Covarrubias para la gestión de obra, fue un acto de corrupción.

    "El  nivel del discurso político en Tlaxcala debe ser otro, los ciudadanos merecen otro nivel de discurso, principalmente de resultados. Imagínense, venir a legislar sobre temas como la quesadilla o como este tipo de cosas, es una verdadera grosería al pueblo tlaxcalteca. No uso la tribuna para venir a dar discursos o hacer circo, maroma y teatro, hay que asumir al responsabilidad que nos ha conferido, pero también quiero ser muy claro: hay que ser original, hay que tener identidad propia, no hay que copiarnos los discursos o los programas de televisión o enseñando visiones. Hay que asumir nuestra responsabilidad porque quien no la asuma, sin duda se va a andar orinando en los vehículos", recalcó.