Zurya Escamilla Díaz (Tlaxcala, 3 de agosto de 2023) Con la eliminación del trámite de apostilla para los documentos de personas nacidas en el extranjero implica garantizar la equidad y los derechos humanos de las personas migrantes, afirmaron autoridades y activistas que han trabajado para eliminar este requisito para legalizar las actas y certificados de quienes nacieron fuera del país, pero regresan a Tlaxcala para inscribir su doble nacionalidad.
En conferencia de prensa, Norma Mendieta, coordinadora de incidencias políticas en el Centro de Atención a la Familia Migrante Indígena (CAFAMI), explicó que este trámite era el principal obstáculo para que quienes tienen derecho a la nacionalidad mexicana -aun nacidos en otro país- puedan acceder a éste y a documentos de identidad en México; por lo que el hecho de que Tlaxcala sea la primera entidad en eliminar este requisito implica un cambio estructural.
De igual forma, destacó que no se trata solo de un programa o medida temporal, ni dependerá de la voluntad política de los servidores públicos en el Registro Civil; sino que es una política pública en beneficio de la niñez nacida en el extranjero, puesto que muchas de ellas se encontraban jurídicamente invisibles en México porque no podían realizar este trámite directamente en las oficinas consulares y ahora podrán avanzar en su proceso de integración a la comunidad con la garantía de respeto a sus derechos básicos.
Finalmente, puntualizó que es necesario trabajar para su implementación y que no sea un cambio en el papel, sino que tanto las instituciones estatales como municipales sepan que aquellas personas nacidas en el extranjero, de padre o madre mexicanos, pueden acceder a la doble nacionalidad.
Mientras que Víctor Hugo Mena Hernández, director de la Coordinación de Registro Civil del Estado de Tlaxcala, enfatizó que la apostilla había sido un calvario para muchos connacionales que eran expulsados de otro país y que no contaban con los medios para hacer este procedimiento; sin embargo, con esta reforma al reglamento interno, les garantizarán que nazcan a la vida jurídica de México y que los servidores públicos en el registro civil los traten con equidad y con pleno respeto a sus derechos humanos.
Explicó que a partir de este cambio, la carga de la prueba ya no recaerá en los particulares que anteriormente debían llevar sus documentos apostillados; sino en las autoridades que deberán corroborar y validar la legalidad de los documentos.
Ante las personas reunidas en el Museo de la Memoria de la ciudad de Tlaxcala, Jorge Wheatley Fernández, director general del Registro Nacional de Población e Identidad (RENAPO), indicó que la apostilla es un trámite que data del siglo XIX cuando era necesario certificar la autenticidad de los documentos; sin embargo, ahora que ya es posible realizar esto por medios electrónicos, es necesario colocar los derechos humanos sobre la tramitología y burocracia.
Agregó que ya trabajan con otras entidades del país para ampliar este ejercicio que por el momento únicamente se lleva a cabo a través del programa Todos somos México que facilita el registro de quienes hayan nacido en Estados Unidos con padre o madre de nacionalidad mexicana; a través de éste, tan solo en la actual administración federal han registrado a 80 mil menores sin la necesidad de la apostilla; lo que asegura que con su identidad reconocida puedan acceder a educación, salud y trabajo.
En la conferencia de prensa estuvieron presentes Jerenna y José Molina, primeros beneficiados de la eliminación de la apostilla, quienes comentaron que habían enfrentado diversas dificultades por no tener el acta apostillada porque es complicado realizar este trámite desde México; ello les había impedido acceder a otros derechos como a la salud o educación. Por ello, pidieron que este trámite se elimine en todo el país para que más personas tengan como ellos la fortuna de obtener su registro sin más requisitos extras.
Muchos no tenemos dinero, nos dijeron que no aplicábamos para obtener la doble nacionalidad, nosotros ya nos habíamos desilusionado por no poder hacer nada; pero pudimos tener la nacionalidad y nos dijeron que somos la primer familia, estamos como testigos en carne propia de que sí se pudo y se va a poder", apuntó José.
En el evento también estuvieron presentes Roberto Zárate, coordinador nacional jurídico de RENAPO; una representante de la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación; Mario Osvaldo Ocaña Horcasitas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados; Ana Bertha Mastranzo Corona, directora del Sistema Integral de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes (SIPPINA); Paula Salvaza, directora de Atención a Migrantes; y una represente del Instituto para las Mujeres en Migración (IMUMI) quienes reconocieron al gobierno de Tlaxcala por esta política que beneficia a todas las personas en contexto de movilidad.
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