Zurya Escamilla Díaz (Tlaxcala, 12 de diciembre de 2022) La promoción de vocaciones debe ser un trabajo desde las familias, consideró el padre Jesús Arroyo Soca, rector del Seminario de Tlaxcala; quien refirió que anualmente llegan a tener entre tres y seis ordenaciones.
"Las vocaciones es un tema de la iglesia que preocupa en el sentido de que ha disminuido la ilusión de muchos jóvenes por la vocación sacerdotal. No es tanto por eso, sino de todas las vocaciones como el matrimonio, hay muchos jóvenes que no creen en el matrimonio, no se comprometen, a lo mejor no quieren comprometer su vida con una persona o con Dios para siempre, ese para siempre es el que a veces le cueste un poquito a los jóvenes", explicó en conferencia del prensa al dar a conocer las actividades de la Feria Navideña del Seminario que tendrá lugar del 23 al 25 de diciembre.
No obstante, agregó que la Iglesia Católica está esperanzada en que a través de diferentes actividades como campamentos, retiros, visitas a parroquias e invitaciones directas, más jóvenes estén interesados en ingresar al seminario.
En este sentido, mencionó que actualmente son 20 los jóvenes que comienzan su formación sacerdotal cada curso escolar; mientras que la cantidad de quienes se ordenan varía año con año. "A veces puede haber tres sacerdotes en un año, puede haber seis, una muy numerosa fue de 10, pero también ha habido años en que no hay o hay uno; pero el Seminario sigue dando sacerdotes".
Sobre las razones que han identificado para que no haya interés de las nuevas generaciones en la vocación sacerdotal, Arroyo Sosa consideró que tiene que ver con las familias que no han tenido el cuidado de sembrar el amor a Dios. "Se dice que el primer seminario es la familia y si hay familias cercanas a Dios, naturalmente va a haber niños que se entusiasmen por amar a Dios y ser sacerdotes".
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