Zurya Escamilla Díaz (Tlaxcala, Tlax., 20 de diciembre de 2017) De cara a que en febrero sea expedido el Código Nacional de Procedimientos Laborales por el Congreso de la Unión, la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) especial número 46 se ha dado a la tarea de disminuir el número de amparos por omisión.
Juan Jesús Pineda Villanueva, presidente de la JFCA 46, señaló en entrevista que el objetivo es entregar el menor número de casos posible al próximo tribunal laboral que se constituirá derivado de la reforma.
Son cuatro mil 700 expedientes activos a la fecha y “no se trata de resolver por resolver, porque eso no nos sirve, nos sirve resolver sustanciosa y congruentemente para que el colegiado confirme nuestras resoluciones en caso de que impugne alguna de las partes”.
Pineda Villanueva expuso que para desahogar el mayor número de expedientes es necesario acercarse con los abogados, conocer cuántos casos tienen en curso y tener el compromiso de resolver los asuntos; ya que anteriormente pasaba una semana o un mes y no se tenían avances, por lo cual los litigantes ya no creían en la palabra de la autoridad laboral y aumentaba el índice de amparos por omisión.
Esto deriva en que el juzgado da un plazo de tres a 10 días para emitir el laudo y entonces los fallo que se dictan ya no son consistentes y de calidad, sino que son con prisa para cumplir con los términos, observó.
“Al bajar la carga de amparos por omisión, sube la calidad, la cantidad y, sobre todo, me permite abatir el rezago que tiene la junta”, puntualizó.
Asimismo, informó que el personal de la JFCA ha recibido pláticas respecto a la próxima transición -prevista para agosto o septiembre 2018- de las juntas a tribunales; prevista para agosto o septiembre -si el código se aprueba, con el objetivo de que en octubre de 2018 comience a funcionar.
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